La palabra «miranda»
Con una población aproximada de 1000 habitantes, se halla situada a 351 metros de altitud en un terreno ondulado sobre una colina cortada a tajo, en la orilla derecha del río Arga y al pié del cerro del Castillo.
Enfrente tiene una hermosa y dilatada huerta a la que se accede desde el núcleo de la población, atravesando el puente.
Acercarse a Miranda por este largo puente de nueve arcos produce la ilusión de llegar a una población medieval amurallada.
Limita con Berbinzana, Tafalla, Lerín y Falces.
Castillo, puente y río, regadío y secano, trigo,vino y aceite, horatlizas y frutas: eso ha sido y de eso ha vivido tradicionalmente Miranda.
Así lo hemos disfrutado
Hemos tenido unos días muy pluviosos. Protegidos por el paraguas, hemos llegado a la estación. Y las previsiones para el día de hoy no son nada halagüeñas: lluvia generalizada por toda Navarra. Y así ha sido durante las casi cuatro horas que ha durado la travesía desde la Venta de S. Miguel hasta Miranda. Además, barro; mucho barro por las pistas que bordean el Moncayuelo primero y por el barranco después hasta alcanzar la fértil huerta de las orillas del Arga.
En la Venta de S. MIguel, km. 8 de la carretera de Peralta, nos han dejado los cuatro autobuses. Bajamos los tres grupos.
El grupo de Montaña enseguida ha cogido por la izquierda para ascender a Moncayuelo y seguir la cresta de Catón pista de los molinos, dirección oeste. Más adelante, salvando el barranco de Catón y llegando al último molino se han dirigido hacia el mirador del Arquillo. Han pasado por las bodegas Inurrieta y cruzando luego el río han llegado por pista hasta Miranda.
Los grupos de Media y Baja hemos hecho juntos la mayor parte del trayecto, hasta el cruce del barranco del Saso. Estos, por la cañada, muy embarrada por cierto, han tomado dirección Noroeste hasta salir a la carretera Tafalla-Miranda al km. 7,8. Allí les ha recogido el autobús y trasladado a Miranda.
Nuestro grupo de Media, desde el barranco, hemos cogido la pista de izquierda que atraviesa una amplia extensión de viñedos y olivares de nueva plantación.Tras recorrer unos tres kilómetros por ella nos ha sacado cerca del Km-. 12 de la carretera Tafalla-Miranda y por ella nos hemos acercado a la villa atravesando su largo puente de 110 m. y 9 arcos.
Cautiva la imagen del río Arga que baja muy crecido y bravo. Desde aquí se percibe una llamativa vista del pueblo que da la sensación de entrar en una ciudad medieval amurallada. La vista se acentúa con la impresionante panorámica de la iglesia de la Asunción y su torre almenada. Un poco más arriba se ven las ruinas del castillo.
Comemos en el amplio restaurante Carranza. Nos da tiempo luego a dar una vuelta turística por la villa, subir a sacar unas fotos desde el castillo y acudir a la parroquia de la Asunción. Es miércoles de ceniza. Cantamos luego la Salve.
Instantáneas del grupo
de Montaña
Comienzo de la salida en ventas de S. Miguel
…nos da un respiro para almorzar
Nunca hemos tenido mejor perchero.
Así bajaba el Arga cerca de Miranda
Último km. llegando a Miranda
Vista tomada desde el puente
Hermosa vista tomada desde la orilla del Arga.
Comida en el restaurante Carranza
Palacio Colomo. Hoy ayuntamiento