Inicialmente, la villa y el castillo pertenecían a la Corona de Aragón.
Con Sancho VII , la propiedad pasa a la Corona de Navarra. El citado rey, apodado “ el Fuerte”, concede un préstamo hipotecario al noble aragonés, dueño del castillo. Como no puede devolverlo en el plazo establecido, “ el Fuerte “ se hace con la propiedad de la fortaleza. Sienta así el precedente del acceso a la propiedad por vía del deshaucio. Era el año 1223. Sancho VII fue un conocido prestamista y , por créditos no devueltos, se adueñó de varias villas y castillos. Aunque era fuerte, no utilizó la fuerza. Era, sin duda, inteligente. ( hoy sería banquero)
Con los años, la propiedad del castillo llega a María de Azpilicueta, oriunda de Baztán, y de Juan de Jaso, padres del Santo. En lucha por su independencia se enfrentan a Castilla y , tras su derrota, el cardenal Cisneros ordena el desmoche de sus almenas y la demolición de sus torres con cuyas piedras llena el foso. Así queda inutilizado como fortaleza defensiva. Era el año 1516. Hasta finales del siglo XIX está en ruinas.
La duquesa de Villahermosa inicia la restauración. Los restos de los que contribuyeron a la reconstrucción del castillo y a la edificación de la basílica descansan en su cripta.
A principio del siglo XX , la duquesa hace donación del castillo y la basílica a la Compañía de Jesús. La restauración ha continuado a lo largo de los años. La última, con motivo de la celebración del V Centenario del Nacimiento de Francisco de Javier, creó un museo en su memoria y honor. (2005)
Hoy está declarado Bien de Interés Cultural y pertenece al Patrimonio Artístico Nacional.
Francisco vive en el castillo y, a los 19 años, marcha a París para estudiar Filosofía en la Universidad de la Sorbona. Allí se encuentra con Iñigo de Loyola y fundan la Compañía de Jesús.
Tras permanecer 11 años en París toma la decisión de evangelizar y, con el patrocinio del rey de Portugal se embarca hacia las Indias Orientales hasta llegar a Japón. Cuando iba, en su labor misionera, a China muere en las costas de la Isla de Sancián el 3 de diciembre de 1552. Su cuerpo descansa en un mausoleo de la basílica del Bom Jesús en Goa. Fue canonizado el 12 de marzo de 1622.
La imagen de este santo navarro es universal. Vestido con sus hábitos de misionero jesuita, portando un crucifijo en su mano, su rostro enjuto y pálido, su barba hirsuta y sus ojos mirando al cielo es una estampa inconfundible. Hoy puede verse en puntos tan distantes como París (cerca del boulevard des Invalides ) , China ( una iglesia se levanta en el lugar donde murió ) Roma ( balconada de la Plaza del Vaticano), Lisboa ( monumento a los descubridores ) Malasia ( vidriera en iglesia de su nombre) , Kagoshima ( Japón ) , Kenya… En un listado de lugares que será muy prolijo enumerar.Es el patrón de Navarra. Y también de Canadá y Australia. Patrón de las Misiones y misioneros.
Patrón de los deportistas navarros , en general, y de los pelotaris, en particular.
Es, en definitiva, un santo que goza de gran veneración por todos los continentes y es una referencia insoslayable de la cultura universal.
Espléndido día de la Javierada. Sol radiante, algo de aire y una temperatura ideal para compartir viacrucis.
Los autobuses paran en el restaurante “Yamaguchi”, en Sangüesa, donde comienzan la andadura los grupos de MONTAÑA y MEDIA. Aquí se baja todo el que quiera participar en los rezos previos al inicio del Viacrucis. en la campa cercana al Yamaguchi. Finalizados los rezos, los amantes del turismo y el grupo de baja suben a los autobuses nº. 1 y nº. 2.
Antes que Javier ya existia esta Cañada de los roncaleses
El grupo de BAJA, en el bus, prosigue unos 2 Km hacia Javier. En las proximidades de la Cantera Redonda, desciende, y desde aquí, por la pista de la derecha,( por ella caminan, igualmente, los grupos de MEDIA y MONTAÑA) a Javier . Este grupo puede continuar por su cuenta hacia Javier o tienen la opción de esperar a los otros dos grupos e incorporarse al Viacrucis con ellos..